Otro tema

Por Fabián Echaniz

En una revelación de último momento científicos encargados de investigar los avances y transformaciones del virus n1h1, mundialmente conocido como “gripe porcina” o para la OMS “peste mexicana”, descubrieron un nuevo síntoma de esta curiosa enfermedad. El mismo estaría relacionado con una fuerte pérdida de memoria, problemas de atención y obsesión acompañada de una ligera paranoia.

Al parecer parte de estos síntomas se estarían reproduciendo en los medios de comunicación y en la sociedad en general, donde esta obsesión ha hecho olvidar a los encargados de informar que el dengue en algunas partes sigue existiendo o que el síndrome urémico hemolítico no es una leyenda urbana.

La desocupación, para éstos, dejó de ser un problema hace tiempo y la crisis económica se ve tan distante como el quiebre de la bolsa en 1929. La creciente pobreza y la acuciante falta de ideas para resolver el otro problema que nos obsesiona, la inseguridad, son cuentos chinos ya.

La tremenda sequía que afecta a todo el país, aparentemente se ahogo en un vaso de agua, así como los dirigentes sin planes ni ideas concretas respecto a la solución de estos problemas. Y si es que encuentran una respuesta, la misma viene de la mano de proyectos rechazados por ellos años atrás… (http://laotrabahia.blogspot.com/2009/04/crisis-del-agua.html). Ídem para la vieja y eterna historia del gas, que ante la falta de mejores y menos costosas opciones elegimos que un buque nos provea de este vital recurso (http://laotrabahia.blogspot.com/2008/07/el-excelsior-un-negocio-muy-peligroso.html ).

Me pregunto ¿Las retenciones no existen más? ¿Dónde está ahora la mesa de enlace? ¿Los pequeños y medianos productores ya no están más en aprietos? Por lo visto no, ya que ahora los miembros representativos del campo se encuentran incursionando la política o discutiendo, en programas de seres nefastos, en cuánto tiempo caerá un gobierno democrático. Gobierno que marcó tendencia en el mundo con las famosas listas testimoniales, la oposición no se queda atrás, y que, al menos por ahora, nuestro nuevo síntoma gripal hace que obviemos las implicancias de esto (la falta de plataformas y proyectos concretos) y nos dediquemos a realizar encuestas para ver qué famoso participará de alguna lista.

Pero no se preocupe, este virus contiene en si mismo el germen de su propia destrucción, porque no pasará mucho tiempo hasta que el mismo se haya auto olvidado y auto descartado.

fabianechaniz@laotrabahia.com