El negocio de la necesidad

Por Fabián Echaniz

Miércoles 15 de abril de 2009, se produce una usurpación en terrenos cercanos a villa caracol. Los vecinos delimitan sus territorios con alambres y alegan que la municipalidad le cedió esos terrenos. Inmediatamente son alertados de la ilegalidad de su acción.

Viernes 17 de abril de 2009, otra usurpación. Esta vez en el barrio Independencia los vecinos nuevamente delimitan el terreno y comienzan a trasladar material. El delegado municipal Norberto García inmediatamente ordena el desalojo y la eliminación de esas delimitaciones. Los “usurpadores” aducen que compraron los terrenos en buena ley a Fernando Morales, abogado.

Respecto de estas dos últimas usurpaciones La Otra Bahía decidió investigar un poco más y se dirigió a la oficina de Catastro Municipal y habló directamente con su directora, Ana María de Aduriz.

En esa oficina nos contó que, respecto a la primera usurpación, la municipalidad, en este momento no posee terrenos de fondo individual. “Lo que la municipalidad tiene son un varios programas como arraigo, como plan familia, en los cuales se están construyendo los planes federales de vivienda”. Y agregó que “recién ahora estamos en convenio con Vialidad Nacional para que entre una gran cantidad de tierras de allí, aunque todavía los terrenos no son municipales”
Por último aseguró que la posesión de las tierras cercanas a Villa Caracol pertenecen a un frigorífico.

En tanto que lo sucedido en Independencia resulta más complicado para la agrimensora, puesto que, en este caso, alguien aduce la propiedad efectiva del terreno. Este señor Morales presentó un acta de derechos y acciones posesorios, y con ésta vendió los derechos y acciones de las tierras a estas personas. Pero “este es un tramite común que no implica la posesión de la tierra. En particular lo que se hizo con este muchacho fue cambiarse el destinatario de la tasa, pero eso no le da ningún derecho; pagar los impuestos no implica la tenencia del terreno”.
Agregó que, además los lotes (que en su mayoría figuran a nombre del apellido Costa) eran vendidos a poco más del 20% de su valor real. Por eso la directora de Catastro aconseja fuertemente que la gente se acerque, que pregunte y se informe, para ver si lo que les ofrecen realmente es legal.

Dicho esto, está claro que las posibilidades de comprar una vivienda propia si se pertenece a la clase media-baja son remotas; hoy por hoy la unica forma de acceder a ella es mediante algún plan municipal de vivienda. Respecto a esto ud. se puede informar acercandose a la municipalidad o directamente a la direccion de tierras en Alsina 35.

La crisis golpea muy duro a las familias, los alquileres suben y la necesidad de una vivienda propia obliga a la gente a tomar medidas casi desesperadas. Y, tristemente, aquí comienza el negocio de la necesidad donde gran cantidad de conocedores del tema venden la información de terrenos baldíos en conflicto o litigio con muchos dueños, etc. y venden esta información para que otros hagan usufructo de ella o directamente ellos mismos deciden aprovecharse del desconocimiento y de la extrema necesidad.

Cosas de hoy, cosas de no creer, cosas a las que deberemos acostumbrarnos.

fabianechaniz@laotrabahia.com